En 1603, a invitación del Gobernador de la Provincia, se acordó hacer en la plaza el día de Santiago, un juego de cañas, y que se quitase de ella el rollo, trasladándolo a otra parte, que se empedrase y arenase y nombró el Ayuntamiento tres cuadrilleros que lo fueron Benito Carreño Alas, Pedro Rodríguez de León y Pedro Menéndez de Avilés, sobrino del Adelantado de la Florida, armándose a su costa con dos compañeros, que la Villa había de dar tres libreas con sus vaqueros de baeta, con las armas de la Villa y morriones para los que llevaren los atabales.Fue ajustado quitar el rollo (se traslado ala Plaza de La Cámara en nueve mil maravedíes por el maestro Gregorio Bracamonte.
En 1604 se llamó al Ayuntamiento a Crístóbal de Quirós, Alcalde del Castillo de San Martín de Pravia y sargento mayor del Principado. Se conferenció con el mismo acerca de revisar la gente de armas de esta Villa y Concejo, y señalar el día de alarde y trabar algunas escaramuzas. El capitán quería andar a caballo, y el Ayuntamiento resistido por ser propio de los sargentos mayores en campaña y porque así no podía enseñar bién a los arcabuceros ni hacerles marchar con las picas.
En 1605 la Abadesa de San Bernardo pidió al Ayuntamiento un real de agua para el servicio de la comunidad que acababa de trasladarse a ese convento. Le fue concedida del arca que estaba debajo de la casa del Concejo.
En 1610 se dió principio a la reedificación de la Iglesia del propio Convento.
El 14 de diciembre de 1612 a las tres de la tarde se prendió fuego en las casas de la Rúa Nueva (hoy Calle de La Fruta) e impelido de grande y recio viento que luego sobrevino, salió y se pegó de unas casas, y de una acera en otra, y pasó al Calle Oscura (tramo en la Calle de la Fruta que va desde el cruce con la Calle del Sol hasta el Palacio de Camposagrado), que trabas y diligencias sobradas y necesarias pudiesen impedirlo, y en muy breve espacio se quemaron 40 casas y se arruinaron y demolieron otras muchas para que el fuego no pasase a quemar los templos y más pueblo.
Las casas de Concejo, pósito y panera de ella, pesos, medidas, soportales y calles quemadas era donde se hacía un mercado muy populoso al que venían de muchas y diferentes partes a comprar y vender mercaderías y manteniminetos de que era el lugar muy abundante, cercado de murallas, y el dicho incendio fue en la tarde que se hacía el mercado
Y valía para S.M. de diezmos de la mar alcabalas y millones más de 30.000 reales, y por ser el puerto más considerable de esta costa S.M. le abrió y puso en él aduana para sacar por él lanas a Reynos extraños (hasta que subió al Ministerio Jovellanos estuvo en Avilés la Comandancia de Marina que hoy tiene Gijon). Así se expresa el Ayuntamiento en un poder que otorga para pedir a S.M. nuevos arbitrios a fín de resarcir los daños causados por el incendio referido
En 1640 se hicieron tres carretonas para otras tantas piezas de artilleria de bronce y cincuenta para cada uno con la pólvora necesaria
En 1641 se puso el censo de población con el número de vecinos siguiente
Avilés y sus arrabales:---- 232
Sabugo incluso el Gremio:-- 88
Vidriero:------------------ 77
Miranda:------------------- 89
Total:-------------------- 482
En 1690 se regaló por el Ayuntamiento a Don Pedro Valdés Feijoo, sobrino del Cardenal Don Alonso Rodríguez de León, que dejó varios efectos y bienes al Ayuntamiento, como patrono de Humilladero de Rivero, una doce3na de aves, dos carneros, dos cajas de conserva, seis permiles y seis azumbres de vino
Se pidió por el Procurador General se compeliese a los vecinos de la calle de Rivero a empedrar a su costa las fronteras de sus casas
En 1651 aún estaba el Covento de la Merced en raices, pues pide el Comendador al Ayuntamiento el importe de veinte isas, que dijera por el ánima de un cadáver hallado en las arobias. Se trasladó la custodia y se dijo misa en el Covento Nuevo.
En 1668 se hizo el órgano para la Iglesia de San Nicolás
En 1669 se dió posesión de Castellano de la Torre de la Plaza y del Castillo de San Juan de Nieva a Don Gabriel Menéndez de Porres y Avilés, caballero del Orden de Álcantara y adelantado de la provincia de La Florida
En 1685 el Conde Canalejas remitió al Ayuntamiento, por mano del Conde de Peñalba, una arquita claveteada y forrada de encerado verde con un terno para la parroquial de San Nicolás
En 1677, y el día 22 de Abril, se celebró el primer Ayuntamiento de las consistoriales